Con motivo de la celebración del Día del Libro (23 de abril), en clase, estamos trabajando dos fábulas que representaremos ese día para el resto de compañeros del colegio.
La paloma y la hormiga (Esopo)
Había una vez una hormiga que tenía mucha sed y decidió
bajar al río a beber agua. Cuando estaba bebiendo, la corriente se llevó a la
pobre hormiguita y, justo cuando estaba a punto de ahogarse, una paloma que
había en un árbol le lanzó al río una rama a la que se agarró fuertemente la
hormiga. Mientras, un cazador preparaba su arma para cazar a la paloma. Pero la
hormiga se dio cuenta y, rápidamente, mordió al cazador en el talón. Tal fue el
dolor del mordisco que al cazador se le cayó su arma. Y fue en ese momento
cuando la paloma escapó volando.
MORALEJA: “Siempre hay que estar dispuestos a ayudar a los
demás”.
Los dos amigos y el oso (Samaniego)
Había una vez dos amigos que iban
paseando por el bosque. De repente, se les apareció un oso. Uno de ellos se
subió rápidamente a un árbol y se escondió. El otro, un poco más torpe para
trepar, no tuvo más remedio que tirarse al suelo y fingir que estaba muerto.
Dicen que los osos no comen
animales muertos, así que le olió con su hocico y se marchó dejándolo allí
tirado. Cuando el amigo bajó del árbol, le preguntó:
- ¿Te ha dicho algo el oso al
oído?
Y él le contestó:
- No es bueno pasear con gente
que te deja solo cuando hay un peligro.
MORALEJA: “Los amigos siempre ayudan a sus amigos cuando lo necesitan”.